Robin Williams volvió a ingresar a un centro de rehabilitación, pero no por una recaída, sino para reforzar su voluntad de mantenerse sobrio.
«Después de haber trabajado en varios proyectos seguidos, Robin está simplemente tomando la oportunidad para ajustarse y enfocarse en su continuo compromiso de mantenerse sobrio, algo de lo que está muy orgulloso», dijo el representante del actor mediante un comunicado de prensa.
Williams buscó tratamiento por primera vez para su adicción al alcohol en 2006 y luchó con una adicción a las drogas al principio de su carrera.
«La cocaina para mí era un lugar para esconderse», le dijo Williams a People en 1988. «La mayoría de las personas se drogaba con cocaína. [Eso] me puso lento».
La expectativa de convertirse en padre, así como la trágica muerte de su amigo John Belushi, lo empujaron a dejar las adicciones.
«La tragedia de Belushi fue aterradora», dijo Williams. «Su muerte asustó a mucha gente del medio del espectáculo. Causó un gran éxodo de las drogas y para mí venía un niño en camino. Yo sabía que iba a ser padre y no podía vivir ese tipo de vida».
Williams también tiene una hija, Zelda de 24 y otro hijo, Cody de 22, de su segundo matrimonio con Marsha Garces.
AGENCIAS
