¿Los bebés pueden tener cáncer?

El cáncer es una de las principales causas de muerte en el mundo. De hecho, según la Organización Mundial de Salud, el cáncer terminó de extinguir más de ocho millones de vidas en 2012. Se trata de una epidemia que no hace distinciones; se lleva tanto a adultos, como a bebés.

¿Qué es el cáncer?

«Cáncer» es un término genérico que se utiliza para designar a un conjunto de enfermedades que puede afectar a cualquier parte del cuerpo. Su rasgo más característico es la veloz aparición y reproducción de células anormales que crecen mucho más de lo normal y pueden llegar a expandirse muy rápidamente. Este proceso de propagación es conocido con el nombre de metástasis y constituye la principal causa de muerte por cáncer.

Tipos de cáncer más frecuentes en bebés

La salud de los bebés es particularmente vulnerable a la aparición de ciertos tipos de cáncer. A continuación, ahondaremos en tres de los más frecuentes.

#1 Leucemia

La leucemia es, sin duda, el tipo de cáncer más frecuente entre los más pequeños. Aún así, y por fortuna, sigue siendo bastante raro. Esta enfermedad supone la producción anormal de glóbulos blancos que, en lugar de proteger al cuerpo, se reproducen rápidamente y terminan por saturar la médula ósea. De este modo, los glóbulos blancos se rebelan y fracasan en el cumplimiento de sus funciones.

#2 Tumor cerebral

Afortunadamente, los tumores cerebrales en niños son también poco frecuentes. En Estados Unidos, por ejemplo, 3.100 niños (de 73 millones) son diagnosticados con esta enfermedad cada año. Este tipo de tumores pueden nacer en el cerebro o llegar a él por metástasis. Sus principales síntomas son: dolores de cabeza, náuseas, vómitos, visión borrosa, mareos y dificultades para caminar o manipular objetos.

#3 Linfoma

«Linfoma» es el término que se utiliza para designar a todas las variedades de cáncer que surgen en el sistema linfático. Este se constituye de cientos de glándulas que están esparcidas por todo el cuerpo y se encargan de proteger al cuerpo de gérmenes y otros intrusos capaces de causar daño. El principal síntoma de esta aflicción es el agrandamiento de los ganglios linfáticos afectados. Ten presente que si estos se encuentran el el cuello, axilas o ingle son fácilmente perceptibles -no así si están ubicados en regiones más internas, como el abdomen.