Todo comenzó cuando el fotógrafo escandinavo Torgeir Berge y su perro Tinni exploraron el bosque noruego y se encontraron con un zorro salvaje con quien Tinni inmediatamente hizo amistad, por lo que Berge con su cámara capturó una extraña e inusual amistad animal.
Mientras pasaban las horas se dio cuenta de lo similar que era el comportamiento del zorro salvaje con su mejor amigo domesticado. Llamó al salvaje animalito Sniffer y se dedicó a hacer un viaje visual por la agradable historia casi de Disney que se desarrollaba frente a sus ojos.
Sniffer y Tinni ahora son inseparables y son una prueba viviente de que la verdadera amistad tiene el poder de ignorar las diferencias, sean de raza, cultura, religión o cualquier otra división.
La conmovedora experiencia ha motivado a Berge a escribir un libro para niños de manera que se incentive la protección a los animales salvajes, en contra de la industria de las pieles y la explotación de los zorros. «Sniffer y Tinni quieren que difundamos su mensaje de amistad, para que se sepa que un zorro es solamente un perro del bosque con las mismas reacciones y movimientos que los perros que conocemos como los mejores amigos del hombre», afirma.