El desahogo de Meghan sobre su vida en la familia real

Luego de semanas de controversia alrededor de Meghan Markle por sus acciones de “diva”, la duquesa de Sussex, de 37 años, se desahogó recientemente sobre cómo sobrelleva sus funciones en la familia real británica. Y la confesión la hizo al cantante Pharrell Williams.

Fue en la alfombra roja de la película “El Rey León”, en Londres, el pasado domingo, donde el príncipe Harry y Meghan tuvieron un encuentro “relajado” con celebridades como Beyoncé, y además conocieron a las estrellas de la película.

Pero fueron las palabras del cantante Pharrell las que provocaron algo en la duquesa, quien resumió de forma espontánea lo que siente sobre las presiones y críticas alrededor suyo. Pharrell, quien participó en la banda sonora de la producción de Disney, elogió la maravillosa unión de Meghan y Harry cuando los saludó en la alfombra roja.

“Estoy muy feliz por su unión. El amor es asombroso. Es maravilloso. No lo den por sentado. Significa mucho debido al momento que se vive hoy, solo quería decirles que es muy importante para muchos de nosotros. En serio”, les dijo el cantante.

Te puede interesar: Luisito Comunica da la cara ante supuesta infidelidad

Meghan respondió ante las emotivas palabras y se sinceró de inmediato: “Gracias, no nos lo ponen fácil”. Según varios medios, el cantante le aconsejó a la pareja que el secreto es “encontrar tiempo para ellos”.

Después, los duques de Sussex ríen y siguen caminando. Momentos antes, el príncipe Harry había iniciado la plática al señalar la chaqueta y pantalones cortos que llevaba Pharrell en el evento.

“Me encanta el look”, le dijo Harry, al señalar el peculiar atuendo del cantante.

La revelación de Meghan se da luego de la pareja ha sido el blanco de numerosas críticas tras el bautizo privado de su hijo Archie, y el hecho de que mantuvieron en secreto a los padrinos. También, Meghan fue duramente criticada al asistir a una presentación “privada” de un partido en Wimbledon junto a unos amigos.

Ese día, la duquesa causó polémica al ocupar un lugar privilegiado en el estadio, lo que dejó a muchos fans sin ingresar al juego de la tenista y amiga Serena Williams. Meghan tampoco permitió que le tomaran fotografías.