En Poniente hay dragones, se pueden resucitar hombres y hay unos muertos vivientes llamados caminantes blancos. Esto lo compramos porque se trata de un universo fantástico creado por George R.R. Martin y tiene sus propias reglas.
En cambio, lo que no debería haber en Juego de tronos son cafés para llevar en vasos de plástico como el que se les ha colado a los productores de la serie en un plano del cuarto episodio de la octava temporada.
Luego de la polémica que se hizo por la aparición de un vaso de Starbucks en el capítulo 4 de la octava temporada de Game of Thrones, la actriz Emilia Clarke realizó una publicación donde insinuó haber encontrado al culpable del acontecimiento.
La actriz que interpreta a Daenerys en la popular serie de HBO dio a conocer que a pesar de que el vaso aparece cerca de su personaje en la escena, ella no fue la culpable sino Jason Momoa que pasó a visitarlos durante las grabaciones.
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"¿Acabo de encontrar la verdad aquí? La portadora del vaso no bebió el té de Starbucks … Ah, y esto no es un spoiler, solo un vagabundo perdido que viene a casa por un vaso a mitad de la filmación … Jason Momoa, eres tan ardiente que haces que mi cabello se vuelva azul", publicó en Instagram.
Jason Momoa participó en Game of Thrones en las temporadas 1 y 2, más tarde tomó el papel de Aquaman en el Universo Cinematográfico de DC Comics.
Este domingo 12 de mayo se emitirá el siguiente capítulo de Game of Thrones, el penúltimo de la octava y última temporada de la serie.
