La popular Rihanna actuará esta noche en Tel Aviv ante unos 50.000 espectadores con un concierto con el que Israel cerrará oficialmente el período megaproducciones de verano y en el que algunos medios vaticinan alguna sorpresa provocadora por parte de la cantante.
Rihanna llegó esta mañana a Tel Aviv en un avión privado procedente de Dubai, donde dio su último concierto en el marco de su gira «Diamonds World Tour» y provocó un pequeño escándalo por una sensual fotografía ante la Gran Mezquita del Jeque Zayed.
Fuentes de la organización dijeron a Efe que la cantante, que ya ha vendido más de cien millones de discos en su corta carrera, aprovechará el día para visitar algún lugar turístico y que por la tarde se retirará a su hotel para descansar antes del concierto.
La última vez que actuó en este país, donde cuenta con miles de admiradores, lo hizo en 2010, aunque debido a la alta demanda de entradas cantará en esta ocasión en el Parque Hayarkón de Tel Aviv y no en el pequeño estadio Bloomfield.
«Mother Mary», «Phresh out the runway» y «Birthday cake» serán algunos de los hits de un concierto en el que la entrada más barata costaba 78 euros y la más cara 308.
Agencias