Desde usar jabón en polvo para quitarse el mal olor hasta aplicarse cloro para blanquear los labios vaginales son algunas de las tonterías que algunas mujeres –por ignorancia y desesperación– han llegado a hacer.
El olor de la vagina, su color, textura y humedad depende de diversos factores y hábitos; no obstante, querer que huela a margaritas ahí abajo es tan absurdo como tratar de que esta área siempre esté seca.
Es imposible que una zona cubierta por una abundante cantidad de bacterias no patógenas llamadas microbiomas no expida un olor tan particular. Así que, en lugar de irritar o hasta herir la vagina con productos nocivos y hábitos dañinos, se puede optar por una serie de cambios en la alimentación que ayuden a endulzar o reducir la acidez del sabor del flujo vaginal, informa Cultura Colectiva.
Para eliminar las toxinas que provocan el mal sabor del flujo:
Agua
Piña
Sandía
Uvas moradas
Jugo de arándano
Para endulzar el sabor de tu vagina y ayudar al balance hormonal:
Apio
Limón
Perejil
Para darle un toque fresco al flujo vaginal:
Tés
Infusiones
Menta
Canela
Si no quieres volver más ácido, amargo o penetrante el sabor de tus labios vaginales evita:
Lácteos
Ajo
Cebolla
Brócoli
Espárragos
Alcohol
Cigarro
La vagina es una de las partes más delicadas del cuerpo femenino, por lo tanto no es saludable limpiarla con cualquier tipo de productos o someterla a remedios que posiblemente puedan lastimarla. En segundo lugar, debemos entender –tanto hombres como mujeres– que así como el pene y los testículos tienen un olor natural y particular, el flujo vaginal también; así que dejemos de intentar eliminarlo.