Las articulaciones se desgastan con el paso de los años, de eso no hay duda. Conviene reducir la inflamación cuanto antes, para evitar la degradación del cartílago. La solución a los dolores articulares se encuentra en la alimentación y en algunos remedios naturales a base de plantas.
Alimentos a evitar para el dolor articular
Si se sufren dolores de las articulaciones, se deben eliminar o al menos limitar los alimentos que aporten toxinas, en particular ácido úrico. Los alimentos ricos en purinas son la carne, los mariscos, y casquería. Se debe evitar también el té, el café, el cacao, el mate, la guaraná y todo lo que contenga cafeína, una sustancia natural del grupo de alcaloides derivados de la purina.
Igualmente, hay que desconfiar de los alimentos que favorecen el desarrollo de estados de carencia como los cereales refinados (pan blanco, pasta blanca, arroz blanco). Sin embargo, es bueno dar prioridad a productos semi-integrales frente a los integrales, porque aportan sales minerales y vitaminas. Evitar el salvado: a la larga irrita la mucosa intestinal.
También conviene olvidarse del azúcar refinado, cuyo consumo está en el origen de las carencias de sales minerales, principalmente el calcio. Se debe reemplazar por miel, stevia o azúcar moreno. Lo mismo ocurre con la sal, que se debe consumir sin refinar. De esta forma, puede aportar sales minerales y oligoelementos (magnesio y hierro, principalmente).
Evitar las grasas saturadas es importante, especialmente las contenidas en los alimentos industrializados, ya que favorecen las reacciones inflamatorias. Frente a los aceites de maíz y girasol ricos en omega 6, precursores de moléculas proinflamatorias, es preferible consumir aceites de primera presión en frío de nuez y de colza, ricos en omega 3, precursores de moléculas antiinflamatorias.
Tampoco se debe abusar de las especias (pimienta, comino, etc.) ni los condimentos (pimiento, mostaza). Lo ideal es reemplazarlos por hierbas aromáticas (albahaca, tomillo, perejil), ajo o cebolla.
Conviene no olvidar que el alcohol es tóxico para el organismo. Su metabolización consume minerales y vitaminas, participando así en el establecimiento de carencias y produciendo ácidos tóxicos. Pero no se trata de privarse al 100%, sino de consumir con moderación: un buen vaso de vino durante las comidas de vez en cuando no hace daño a nadie.
Dieta para los dolores articulares
Si lo que queremos es aliviar los dolores articulares, entonces debemos llevar a cabo una dieta saludable y balanceada. ¿Cómo hacerlo? En primer lugar, aumentando el consumo de frutas y verduras frescas. Como recordatorio, conviene no olvidar que la fruta se debe comer fuera de las comidas y eliminar el postre.
Las semillas germinadas aportan vitaminas y sales minerales. En otras palabras, la alimentación debe ser razonable, con el fin de restablecer el equilibrio ácido-base y calmar los dolores articulares.
