Han pasado ya más de dos años desde que Robin Williams nos decía adiós. El actor falleció a la edad de 63 años el 11 de agosto de 2014 en su casa del norte de California. Una noticia para todos sus admiradores y seres queridos, que a día de hoy aún lloran su pérdida. Especialmente su viuda, Susan Schneider, que ha querido compartir cómo fueron los últimos meses de vida del recordado intérprete.
Susan ha escrito una conmovedora carta para la Oficina de Prensa de la Academia Americana de Neurología titulada The terrorist inside my husband’s brain («El terrorista dentro del cerebro de mi marido»). La viuda del actor, que estuvo casada con él desde 2011, ya aseguraba el año pasado que la causa de la muerte de su esposo fue la demencia de cuerpos de Lewy, una enfermedad neurodegenerativa que constituye la tercera causa de demencia detrás del Alzheimer y la demencia vascular.
«Es una historia personal, tristemente trágica y que parte el corazón», ha confesado Susan Schneider Williams, subrayando que «por compartir esta información con ustedes, sé que van a ayudar a hacer una diferencia en las vidas de otras personas».
Según los médicos, el maestro del cine sufrió una de las peores patologías de esa rara enfermedad, que se habían visto antes. Sin embargo, el propio actor no lo supo y el diagnóstico mortal fue revelado solo tras la autopsia. «Cuánto quisiera que él hubiese sabido por qué se esforzaba tanto, y que no fue una debilidad de su corazón, espíritu o carácter», ha expresado Schneider Williams.
La mujer ha lamentado que se sentía «incapaz y congelada» y se encontraba «en la oscuridad de desconocer qué pasaba» con su esposo. Se preguntaba en aquel entonces si «fue una fuente solitaria, un terrorista solitario o un conjunto completo de la enfermedad que le diluviaba». Por su parte, el actor, que «iba perdiendo la razón y estaba consciente de ello», decía: «simplemente quiero reiniciar mi cerebro».
Un síntoma clave de dicha enfermedad son las alucinaciones, así que lo más probable es que el artista las tuvo, pero prefirió no abordarlo. Tras la muerte trágica de su marido Susan Schneider Williams pretende levantar conciencia acerca de la enfermedad, muy difícil para diagnosticar, que representa el 10-15% de los casos de demencia.