Estrella UFC Miesha Tate ayuda a niña lesionada en el monte

Una niña de seis años que se rompió un brazo durante una excursión por el monte cerca de Las Vegas inspiró a la estrella de la UFC Miesha Tate, que la ayudó en el descenso.

La luchadora de artes marciales mixtas comentó en Facebook que se topó con la pequeña, de seis años, en la popular senda Mary Jane Falls del monte Charleston, a unas 40 millas al noroeste de Las Vegas.

Amber Ellis, de Lake Havasu City, en Arizona, dijo que su hija Kai se rompió el brazo en lo alto de la montaña durante un paseo familiar durante el fin de semana feriado del Día del Trabajo.

«Estaba jugando con su hermana, se tropezó con una roca y aterrizó sobre el brazo», contó Ellis a The Associated Press. Le entablillaron el brazo y ella la tomó en brazos para emprender el camino de regreso. Un poco más abajo, Tate se cruzó con ellas y le preguntó a Ellis si necesitaba ayuda, diciendo que le vendría bien el ejercicio. Ellis dejó que Kai decidiese quien la cargaría el resto del trayecto.

«Quiso a Miesha, lo que sorprendió, yo estaba en plan ‘¿no quieres a mama?»’, dijo el martes durante una cita médica por el brazo de su hija. «Kai fue una campeona, no lloró».

Tate dijo que ayudó a la familia tras ver a lo lejos que Ellis tenía problemas para cargar a la niña montaña abajo. La pareja descendió después sin problemas, algo que la deportista atribuyó al trabajo en grupo.

Ellis dio las gracias a Tate en una publicación en Facebook, calificándola de «verdadero salvavidas» porque reconoció que no podría haberlo hecho sola.

«Kai y yo aprendimos mucho la una de la otra en las casi dos millas de descenso y es justo decir que me ha inspirado», apuntó Tate.

El responsable del Departamento de Bomberos del monte Charleston, el capitán Chris Culver, dijo el martes que las autoridades no fueron notificadas del incidente porque no hubo llamadas al teléfono de emergencias 911 ni reporte formal del incidente, pero esto no es algo extraño ya que la gente con heridas no peligrosas suele ir por su propio pie al hospital en lugar de solicitar ayuda.