Sharon Stone a sus 58 años se encontraba disfrutando de unas relajadas vacaciones en la playa del distrito californiano de Venice cuando tuvo un pequeño accidente con su bikini.
La actriz estaba en compañía de una amiga cuando fue fotografiada por los periodistas que captaron la imagen de cómo se le salía un pezón del bikini animal print que lucía Sharon.
Aunque para Stone ser retratada desnuda no es nada nuevo, más bien es toda una experta. Su posado en la revista Playboy en 1990 fue uno de los pasos más acertados en su carrera profesional, ya que a raíz de este desnudo llamó la atención del director de cine Paul Verhoeven, que la elegiría después para el que sin duda será el papel más importante de su vida: el de Catherine Tramell en Bajos Instintos.
Su interpretación y su famoso cruce de piernas la elevó a ser una de las más sexys de Hollywood, algo que conserva con los años porque volvió a repetir portada el año pasado, en esta ocasión para la Harper’s Baazar, con una figura espectacular.
Algo que la actriz no habría imaginado en sus comienzos, ya que tal y como desveló en su entrevista para Harper’s Bazzar: «Todo el mundo decía que no era sexy y que eso me impediría conseguir ciertos papeles».
¨Soy plenamente consciente de que mi trasero parece una bolsa de tortitas de maíz. No intento ser la mujer más guapa del mundo. En cierto momento, empiezas a plantearte qué es realmente sexy, y no se trata solo de la elevación de tus pechos. Es estar presente y pasarlo bien y gustarte lo suficiente para que te guste la persona con la que estás», así ve ahora la belleza y la sensualidad la actriz, demostrando a su vez que no ha perdido su sentido del humor.