Tremendas declaraciones fueron las que se dieron a conocer a través del libro ‘Diana: A Closely Guarded Secret’, pues a tan sólo unas semanas de que se cumplan 20 años de la muerte de Lady Di, revelaron detalles de su vida íntima y que manchan su imagen.
Fue su guardaespaldas Ken Wharfe, quien reveló este pasaje de su sexualidad, y es que hasta se atrevió a decir que la fallecida princesa de Gales era muy «alocada», ya que se complacía con juguetes sexuales.
«Lo llevaba a todas partes, viajaba fuera del Reino Unido y no se le olvidaba. No sólo era su juguete sexual, sino que además era su amuleto de la suerte», dijo el guardaespaldas.
Y es que con estas palabras, podría revelar que desde entonces había problemas en su matrimonio con el Príncipe Carlos de Gales, a quien recientemente le descubrieron un romance gay con un hombre joven.
No obstante, el morboso relato no terminó ahí, ya que recordó la vez que voló a París, en noviembre de 1992, cuando en una «fiesta salvaje personal» llevó en su cartera su vibrador, objeto que no podía descuidar para nada, y al que había bautizado como ‘Le Gadget'».
Pero su afición por el consolador era tal, que una vez que lo olvidó en un cajón del Palacio de Buckingham, mandó a alguien por él e hizo que se lo llevaran hasta Nepal en una vajilla diplomática a la embajada británica en Katmandú.