El hecho sucedió en la ciudad de Yekaterimburgo, en Rusia. La niña se tiró porque quería descender del edificio para buscar a su madre.
Un hombre salvó hoy la vida de una niña de cuatro años al atraparla luego de una caída desde un octavo piso en la ciudad rusa de Yekaterimburgo, capital de la región de los Urales.
Su caída se debió a que la madre había dejado a su hija sola durante diez minutos para ir a la tienda, pero con las puertas y ventanas cerradas. Esto generó frustración en la pequeña, que, al notar la ausencia de su mamá, quiso seguirla. Se subió a un taburete, abrió la ventana y empezó a descender.
Por suerte de la pequeña, según la policía local, un vecino que se encontraba paseando a su perro vio cómo intentaba descender, por lo que dejó a su mascota al cuidado de unos transeúntes y comenzó a gritar dándole indicaciones para que pueda volver a entrar a su casa.
Pero de nada sirvió, ya que la niña comenzó a perder fuerzas, cayendo de cabeza a una velocidad descontrolada. A pesar de esto, el hombre logró agarrarla a tiempo.
Según datos preliminares, la vida de la niña no corre peligro, pero sí debe recomponerse de lesiones en la cabeza y el hombro, mientras que su salvador tiene quebrado el brazo.