Un paquistaní que se había escondido en un baúl en casa de su amante murió asfixiado después de que los parientes de ella se negaran a liberarlo.
Mushtaq Ahmed Baloch, casado de 22 años, se reunió el pasado sábado por la noche con su amante, su prima Rani Bibi, madre de dos niños, en la casa de ella, situada en las afueras de Muzaffargarh, una ciudad del centro del país.
Pero al entrar en la vivienda, donde también dormían el padre y los cuñados de la mujer, Baloch hizo ruido y los despertó. Desesperada, la mujer pidió a su amante que se escondiera en un gran baúl que tenía en su habitación y lo cerró con candado.
El hombre se puso a gritar porque se asfixiaba, pero ellos no abrieron el baúl y murió al cabo de 15 minutos, explicó la policía.
Hemos arrestado al cuñado de Bibi y a sus dos hijos con cargos de asesinato, dijo el jefe de la policía local de Muzaffargarh, Sardar Muhammad Idrees.
Según el policía, el marido de Bibi no estaba en casa porque trabaja en la ciudad portuaria de Karachi, a 900 kilómetros de distancia.