En una iniciativa precursora en América Latina, dos empresas brasileñas usan desde hace algunos meses la planta de la citronela y la substancia industrial permetrina para revestir varios tejidos y evitar la aproximación del insecto, que también transmite el dengue y el chikunguña.
La ropa de una de las compañías está ideada principalmente para las gestantes, las más vulnerables al zika, un virus que algunos estudios han relacionado con el aumento de casos de microcefalia en Brasil, país que albergará los Olímpicos a partir del 5 de agosto.
«La idea fue usar la citronela, planta repelente, con una nanotecnología capaz de ser incorporada en algunos tejidos. Esto puede ayudar a algunas embarazadas atemorizadas con los riesgos causados por el mosquito», explicó João Ricardo Esteves, director de Megadose, una empresa fabricante de ropa de gestantes del estado de Paraná.
El tejido de las prendas -principalmente jeans y algodón- toma un baño de critonela a través de la nanotecnología, lo que, según sus creadores, garantiza una protección incluso después de las primeras lavadas.
«El tejido de ropa repelente par embarazadas en más suave porque está compuesto con aceites esenciales de citronela y la producción de las piezas está hecha a través de nanopartículas de plantas insertadas en la fibra del producto», afirmó a Efe la gerente de la tienda de Megadose en Sao Paulo, Rafaela Carvalho.
La ropa «antizika» fue creada a comienzos de este año, poco después de que saltaran las alarmas sobre el zika, un virus que mantiene en vilo a los turistas y atletas que a partir del 5 de agosto se concentrarán en Río para los Olímpicos.
Esteves asegura que, aunque ha sido planteado, la compañía no ha tenido tiempo todavía para crear una línea de ropa deportiva para los atletas que visitarán la «Ciudad Maravilhosa»,
En Americana, en el interior del estado de Sao Paulo, otra fábrica produce unos tejidos elásticos que puede ser utilizado para la ropa deportiva, aunque la elaboración de la ropa depende de los clientes que producen las piezas.
«Producimos un tejido con dos propuestas de ‘denim’ para camisas y un tejido tipo elástico para chaquetas, pantalones y sudaderas. Lo lanzamos en abril para que el consumidor final pudiera encontrar los productos antes de los Juegos Olímpicos, pero eso depende de nuestros clientes que producen las piezas», dijo el director de la empresa Santista, Gilberto Stocche.
De acuerdo con el empresario, el aumento de casos de zika y la posible relación con la microcefalia llevaron a la compañía a pensar en tejidos con repelente, que proporcionan la protección sin cambiar los aspectos de un jean común, «sin olor, no queda áspero, como un pantalón normal».
«La protección llega con el tipo de acabado que el tejido recibe, un compuesto a base de Permetrina también utilizado como base de algunas cremas y sprais repelentes», detalló a Efe.
Dependiendo del tejido, las substancias repelentes, bien sea citronela o permitrina, pueden permanecer en los jeans en hasta 50 lavados caseros, 40 para camisas y 20 en la colección de ropas para embarazadas.
Recientemente las dos empresas -de Paraná y Sao Paulo- se asociaron para la producción de pantalones vaqueros para gestantes y están pensando en exportar sus productor, ya que son pioneros en el mercado latinoamericano.
Fuera de Latinoamérica, Corea del Sur están al frente con la iniciativa de crear ropas con repelentes, que incluso serán usadas por los atletas coreanos que competirán en los Juegos Olímpicos.
«Presentamos nuestro producto en todos los mercados donde actuábamos, y ahora en julio estaremos en Colombia para reforzar el producto. La demanda de Colombia puede ser interesante, también por el alto índice de zika», informó Stocche.
La empresa de Paraná, por su parte, pretende expandir su negocio a México y Venezuela, donde también se han registrado casos de virus del Zika.