Paulina Rubio se prepara para enfrentarse a una nueva batalla legal, aunque en este caso no se trata de una demanda interpuesta por algún ex empleado ofendido o de un nuevo capítulo de su interminable proceso de divorcio. En esta ocasión, Paulina Rubio podría sufrir la pérdida de la lujosa propiedad que posee en un edificio de apartamentos de la ciudad de Miami al acumular una deuda cercana a los 30 mil dólares, una cantidad referente a los pagos por el mantenimiento del edificio que la cantante habría dejado de abonar desde el año pasado.
Como asegura el portal Gossip Extra, la intérprete tiene a su comunidad de vecinos en pie de guerra por su escasa implicación en las labores de conservación del bloque que compromete a todos los residentes, sobre todo porque Paulina ni se ha molestado en dirigirse a ellos para explicar las razones de su abandono, ni tan siquiera para abonar una parte de las multas e intereses que se derivan del impago de sus obligaciones legales. La indiferencia de Rubio podría costarle muy cara, ya que la administradora de la propiedad ya ha llevado el caso a los tribunales.
«Estamos utilizando todos los recursos de los que disponemos para lograr nuestro objetivo, pero no puedo ofrecer muchos detalles del proceso porque la demanda ya ha sido procesada y porque estamos a la espera del comienzo del juicio», declaró Didi Ashe, máxima responsable del bloque de viviendas, al mencionado portal.
Según desvela este medio, Paulina adquirió una de las mejores viviendas del complejo residencial en 1994 con la condición inherente de invertir aproximadamente un millón de dólares al mes en todo tipo de gastos relacionados con la comunidad. No obstante, el último cheque que envió a la administradora del edificio data de abril de 2012 -cuando estaba inmersa en los trámites de separación de Nicolás Vallejo-Nágera- y desde entonces sus vecinos no han vuelto a tener noticias de ella.
Los problemas inmobiliarios de la temperamental cantante recuerdan inevitablemente a una situación similar que su madre, la actriz Susana Dosamantes, protagonizó hace tres años en la misma ciudad de Florida. Dispuesta a dejar pasar el tiempo en vez de solventar la gran deuda que acumulaba con un banco estadounidense, la veterana intérprete estuvo a punto de padecer el embargo de la casa que posee en el barrio de Miami Beach pero, en el último momento, logró evitar la tragedia poniéndose al día con los pagos.
A la espera de que salgan a la luz las consecuencias de su último encontronazo con la justicia, Paulina Rubio al menos puede respirar tranquila en relación a los entresijos de su turbulento historial familiar, ya que recientemente un juez de Florida determinó que no tendría que someterse al examen psicológico que Colate solicitó para demostrar que su ex mujer no era apta para el cuidado de Andrea Nicolás, el niño de dos años que la ex pareja tiene en común. De hecho, la celebración de la primera sesión del juicio con el que se iba a dirimir el espinoso tema de la custodia del pequeño ha sufrido un nuevo retraso, esta vez debido a la indisposición de uno de los magistrados.