Jugosas, sabrosas y fáciles de preparar. La hamburguesa es una comida popular en todo el mundo, las hay de todos los sabores, colores y formas.
Un reciente estudio revela que algunas hamburguesas esconden sorpresas bastante desagradables. Clear Labs, una empresa americana dedicada al análisis genético de alimentos, ha realizado un análisis molecular en más de 250 hamburguesas que se comercializan en Estados Unidos, aunque la mayoría pasa la prueba, un 14% presenta ingredientes incorrectos, problemas de higiene y hasta contaminantes.
En el estudio se analizaron concretamente 258 muestras de hamburguesas de distintos tipos, incluyendo carne picada, hamburguesas congeladas y hamburguesas vegetales. Todos productos vendidos en Estados Unidos en el área de California.Las inconsistencias en la lista de ingredientes son el problema más extendido. Hasta un 15,7 por ciento de las hamburguesas vegetarianas analizadas no incluían los ingredientes anunciados en la etiqueta.
Además se encontró un caso de una hamburguesa vegetariana cuya etiqueta anunciaba que el ingrediente principal eran las judías negras, pero no había ni rastro al analizar el producto, mientras que otras muestras contenían carne.
También se encontraron ingredientes que no deberían estar, como carne de pavo, pollo o centeno. Esto supone un problema para consumidores alérgicos y también a aquellos que por motivos culturales no consumen ciertos alimentos.
Los problemas de higiene producidos en la manipulación de los alimentos supusieron un total del 1,6 por ciento de muestras analizadas. Es un porcentaje muy pequeño y los niveles son muy bajos como para dañar la salud, pero las sorpresas que se encontraron los científicos que llevaron a cabo el análisis son, como poco, alarmantes.
Una hamburguesa congelada, de nuevo vegetariana, contenía restos de ADN humano, mientras que tres muestras de hamburguesa con carne contenían ADN de rata.Sin duda, los contaminantes y patógenos son el apartado más delicado debido al peligro potencial que suponen para la salud. Un 4,3% de las muestras contenía algún tipo de patógeno, incluyendo Yersinia pseudotuberculosis, una bacteria que causa síntomas similares a la tuberculosis y E.coli.
Este estudio también destaca que la mayoría de hamburguesas son lo que dicen ser y sus ingredientes corresponden con la etiqueta. Sin embargo, los problemas de variación nutricional sí que están más extendidos. Hasta un 46% tenía más calorías de las prometidas y un 49% más carbohidratos.