Resulta difícil imaginar un robo más descarado: Dos mujeres entran en una tienda de ropa interior femenina Victoria Secret y empiezan a apilar y a poner en bolsas negras de plástico lo que está expuesto en el mostrador.
Lo hacen tan rápido con la cara de quien limpia su patio de hojas secas. Tras coger todo lo que tienen alrededor las mujeres se retiran de la tienda con su botín y como Pedro por su casa.