El perro Sam ha llegado donde ningún animal de peluche lo hizo antes: la estratosfera. Docentes y alumnos de una escuela primaria en Morecambe, en el noroeste de Inglaterra, sujetaron la mascota blanca a un globo de helio y lo lanzaron desde el techo de un hotel el martes.
Grabaron su veloz ascenso a 24 kilómetros (15 millas) de la superficie, mucho más que lo previsto, con una cámara que llevaba consigo.
Cuando el globo reventó, Sam desapareció. La escuela ha tratado de recuperarlo, pero no lo encontraron en el lugar donde aterrizó la cámara con el GPS, unos 50 kilómetros (30 millas) al este.
Han lanzado una campaña en las redes sociales con la esperanza de que alguien encuentre a Sam y lo devuelva.