Con la instalación y colocación de la alfombra roja, la Academia de Hollywood activó este miércoles la cuenta atrás para la 88 edición de los Óscar, que se celebrará el domingo en Los Ángeles (EE.UU.).
En una ciudad acostumbrada a que su ritmo vital dependa de rodajes, estrenos de películas y ceremonias de todo tipo, la operación de desenrollar la alfombra roja para los Óscar es un acontecimiento más dentro de la gran maquinaria del espectáculo de Hollywood.
Poco antes de las 10.00 hora local, periodistas y curiosos se han acercado a la entrada del Dolby Theatre, situado en la célebre avenida Hollywood Boulevard y que acogerá la ceremonia de entrega de los máximos galardones del cine.
A escasos cinco días de que se celebren los Óscar, el glamour en la zona está todavía «en fase de desarrollo» y es el tiempo de los taladros, los martillos, las grúas y los operarios yendo de aquí a allá, antes de que el lujo, los vestidos, las joyas y los esmóquines tomen el Paseo de la Fama este fin de semana.
No obstante, ya están colocadas la tribuna para el público que asistirá al desfile de los artistas así como la gran estatua con la figura del Óscar que preside la entrada del Dolby Theatre, donde están, por ejemplo, las estrellas que rinden homenaje a Martin Scorsese, Halle Berry, Steven Spielberg o Nicole Kidman.
Tres técnicos fueron los encargados este miércoles de desenrollar simbólicamente la alfombra roja, que en realidad no es de tal color sino que se acerca más a un tono burdeos o rosado.
Entre flashes y cámaras de televisión, los tres profesionales desenrollaron, en cuestión de minutos, la primera parte de la alfombra roja y aunque tuvieron algunos problemas con una estructura metálica, todo discurrió con normalidad y sin sobresaltos.
A continuación se aseguraron de que la alfombra estuviera bien situada y de que no hubiera arrugas en su recorrido.
En declaraciones a Efe tras la operación, el técnico Rudy Morales explicó que la alfombra roja tiene, desde la entrada del Dolby Theatre, una longitud de unos 166 metros, aunque su superficie total asciende a unos 2.780 metros cuadrados.
Comentó además que ha participado en la instalación de la alfombra roja para los Óscar desde hace siete años y añadió que la única parte difícil es «alinear» correctamente su trazado y conseguir que esté perfecta para el domingo.
Con el comediante Chris Rock como maestro de ceremonias, la 88 edición de los Óscar aparece con «The Revenant», del mexicano Alejandro González Iñárritu, como la película con más nominaciones, con 12 candidaturas, seguida de los filmes «Mad Max: Fury Road» y «The Martian» con 10 y 7 menciones, respectivamente.