Esta chica de 25 años originaria de Denver, Colorado, está obsesionada con las princesas Disney a tal grado que a lo largo de los años ha gastado más de 14 mil dólares con tal de lucir igual a ellas.
Con este dinero, Sarah se ha hecho de una amplia colección de 17 trajes y 16 pelucas que la ayudan a verse como Bella, Cenicienta, Blancanieves, Ariel, Aurora, Rapunzel, Mérida, Elsa y Anna de Frozen.
Para sustentar sus gustos de princesa Disney, la chica trabaja como gerente de marketing y de vez en cuando asiste a hospitales y hogares de cuidado para entretener a los niños.
Nada me hace más feliz que ver la mirada en la cara de los niños cuando ven a su princesa favorita. Es mágico.