Sucedió como cualquier detención rutinaria de tránsito en Miami: un automóvil fue desviado hacia la cuneta por exceso de velocidad, seguido por una lección sobre la manera apropiada de conducir. El presunto ofensor cuestionó que él haya sobrepasado la velocidad reglamentaria, pero sin pensarlo demasiado se disculpó, y prometió ir más despacio.
Lo extraño es que fue el oficial de policía el acusado de romper el límite de velocidad. Y fue desviado por una civil.
La escena fue grabada y se transmitió en tres videos compartidos en YouTube el viernes por alguien llamada Claudia Castillo, quien se identificó como la conductora justiciera. Filmados desde el asiento del acompañante, los videos narran la persecución del coche de un policía del Condado Miami-Dade.
La razón por la que lo paré hoy, le dijo la mujer al oficial mientras este caminó hacia su auto y la miraba apoyado en la ventanilla del acompañante del vehículo de la mujer, es porque lo ví que iba desde la Calle Miller antes de subirse a la [autopista] Palmetto y estaba yendo a más de 90 millas por hora.
¿De verdad?, contestó el agente. Está bien.
Me pasaste como si estuviera parada, dijo la mujer.
El sitio web La Fotografía no es un Crimen pareció haber sido en primero en promover el video el sábado. Una investigación del periódico Sun Sentinel sobre los excesos de velocidad de los oficiales de policiales les llevó a ganar un premio Pulitzer en el 2013.
Juan Pérez, el nuevo jefe de la policía condal, dijo en un comunicado que el Departamento investigará el incidente una vez que el oficial y la mujer sean identificados. Las medidas necesarias serán tomas en ese momento.