En un primer momento, los veterinarios recomendaron dormir a Bella antes que operarla. Nadie le quería dar al burro Bella una oportunidad para vivir.
Hace un par de años una pareja de Minneapolis, estado de Minnesota (EE.UU:), rescató a una burra miniatura de un criador negligente, ya que este había sido separado al animal de su madre prematuramente, esto le ocasionó problemas en una de sus patas que luego tuvo que ser amputada.
En verdad querían dormirla, recuerda Ana, la dueña de la burra, que luego reclamó que los burros no tienen ningún valor en la sociedad.
Los dueños de Bella le acoplaron una especie de pata de palo mientras buscaban una pata ortopédica más avanzada.
Conseguirla no fue fácil, pero obtuvieron el apoyo de una tienda de prótesis para elaborar una adecuada.