Si muy a menudo te preguntas por qué tu hijo se porta mal, y si sus comportamientos tienen algún significado, EntrePadres te cuenta que hay explicación para cada uno de sus hábitos, esos que a veces logran sacarte de quicio.
Mentiras
Muchas veces lo pillas cuando te dice que ya hizo la cama o que no le pegó al perro. ¿Por qué lo hace? Porque teme al castigo o porque alguna vez se salió con la suya sin que te dieras cuenta.
Burlas
Se burla de los demás porque le divierte y lo hace sentir poderoso. Pero tú debes actuar en este tipo de hábito pues tu hijo debe entender que puede herir los sentimientos del otro. Cada vez que ocurra o que llegue demasiado lejos, deberás apartarlo y conversar sobre la situación para que no vuelva a repetirse.
Bromas y travesuras
Lo hace porque es divertido, aunque también para sentir poder y para obtener una reacción tuya. Habla con él acerca de las bromas inofensivas o las que pueden lastimar al otro, o que las que simplemente no causan gracia o causan enojo. Sería bueno que lo ayudes a diferenciar entre estos tipos de bromas, las aceptables y las que no lo son.
Drama total
Hay momentos en que no sabes si en realidad lo sienten o es todo pura actuación. Lo cierto es que a veces no saben cómo manejar sus emociones y la más pequeña cosa se hace un gran drama, aunque en otras ocasiones es toda una puesta en escena para llamar tu atención. ¿Qué debes hacer? No recompenses su comportamiento, no lo agrandes, pero sé algo comprensiva.
Se hace el bebé
Este comportamiento puede surgir por tres grandes causas: para llamar tu atención, porque se siente abrumado por una nueva etapa o tarea, o porque hay un trauma o cambio importante en su vida.
No le prestes atención a lo que dice cuando habla en «idioma bebé» y pídele que hable como un niño de su edad porque así no le entiendes.
Te ignora
Puede que actúe así porque realmente está compenetrado en la tarea que está realizando o porque no tiene ganas de escucharte ni cumplir con lo que le pides. Para evitarlo, llama su atención antes de hablarle, tocándole su hombro o poniéndote frente a su rostro.
Interrumpe
¿Te suena conocido? Parece que todos los hijos están entrenados en el arte de interrumpir a cada momento. Tu hijo lo puede hacer porque en realidad ignora las reglas de una conversación (no sabe que tiene que esperar su turno para hablar) o porque generalmente así se sale con la suya.
Lo más importante es que sepas que todos estos comportamientos infantiles son totalmente normales y esperables, y que es tu deber enseñarle a tu hijo a ser respetuoso y a comunicarse, en vez de ponerte nerviosa y perder los estribos.