Esta es una técnica para saber con precisión qué porciones deberías comer, y es conocida como la dieta de la mano. Fue publicada por la página estadounidense Guard Your Health como una alternativa saludable que te ayuda a bajar de peso sin caer en las dietas yo-yo» ni restringirte de comer ningún grupo alimenticio.
Los expertos de Guard Your health afirman que al no medir lo que se come, los excesos son de hasta cinco veces la dosis recomendada. Además hacen evidente la tendencia a aumentar las raciones alimenticias que han adquirido muchos países en occidente, citando investigaciones del Departamento de Estudios de Nutrición y Alimentación de la Universidad de Nueva York, que indican que las porciones que se consumen en la actualidad se han ido duplicando generosamente en los últimos 20 años.
La dieta de la mano es una alternativa sana y sobre todo aplicable a largo plazo. La principal ventaja de adquirir este hábito para bajar de peso o mantenerlo controlado es que nunca abandonas ningún tipo de alimento.
Comer de todo un poco, pero en porciones mesuradas y adecuadas te hará más feliz, porque no sentirás que hay alimentos prohibidos, y además es la manera más saludable de obtener resultados a largo plazo en tu cuerpo.
El tamaño de tus manos es proporcional al tamaño de todo tu cuerpo, incluidos los órganos internos encargados de recibir y procesar lo que comes. Por eso, si te alimentas pensando en porciones que no sobrepasen las dimensiones de tus manos, estarás seguro de no sobrecargar tu cuerpo y digestión.
#1. Tus dos manos simulando un recipiente te indican la cantidad de vegetales que debes comer.
#2. Usa la parte de enfrente de tu puño para calcular cuántos carbohidratos (arroz, pasta, etc.) debes servirte.
#3. La palma abierta (sin tener en cuenta los dedos) debe servirte para saber cuál es la porción perfecta de carne y sus alternativas proteínicas.
#4. Tu puño cerrado indica la porción de fruta adecuada para tu cuerpo.
#5. Tu ración de grasas como mantequilla, por ejemplo, no debe ser más grande que la punta de tu dedo índice.
Comienza a porcionar tus comidas y trazarás un camino seguro hacia una vida más saludable y un peso corporal adecuado.