Un estudio realizado por investigadores de las Universidades de Torino y Florencia, Italia, revela que el consumo moderado de vino tinto ayudaría a mejorar el deseo sexual en las mujeres, además de aumentar su lubricación, excitación y función sexual en general.
Publicado en el Journal of Sexual Medicine, este estudio muestra que aquellas mujeres que beben alrededor de dos vasos de vino al día, tienen mejores resultados en el Índice de la Función Sexual Femenina (FSFI), en comparación con quienes son abstemias o que sólo bebían un vaso de vino tinto al día o menos.
La FSFI es una escala aceptada internacionalmente que evalúa la sexualidad de las mujeres a través de 19 preguntas repartidas en seis categorías: deseo, excitación subjetiva, lubricación, orgasmo, satisfacción y dolor.
Aplicada a 798 mujeres de la región de Toscana, durante las pruebas corroboraron que el consumo moderado del vino tinto no afectaba la respuesta sexual de las féminas de manera negativa, sino que la mejoraba, incluido el estado de ánimo adecuado para ello, que no es lo mismo que su predisposición a tener relaciones.
Si bien aún no se conoce del todo el mecanismo por el que el vino tinto mejora el deseo sexual femenino, se piensa que su alto contenido en antioxidantes, como los polifenoles, son los responsables de dicha mejoría, siendo este tipo de vino el que más alto contenido tiene.
Asimismo, existen evidencias de que los flavonoides (otro de los componentes del vino) podrían mejorar la función endotelial, la cual facilita la vasodilatación arterial y todo el conjunto tiene efectos positivos en el deseo sexual y el placer.
De esta manera, la investigación demuestra que el consumo moderado de vino tinto no sólo mejora la salud cardiovascular y que frena el proceso de envejecimiento prematuro de la piel, propiedades que ya se le conocían, sino que ahora además mejora el deseo sexual y la respuesta en la intimidad en las mujeres.
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