NUEVA YORK (AP) Un documental que recorre la vida pública y privada de Mercedes Sosa se estrena el viernes en Estados Unidos, con una primera muestra en una sala de Nueva York, donde la cantante hizo vibrar a cientos de personas.
«Mercedes Sosa: La voz de Latinoamérica» se remonta a la niñez de la artista argentina y narra su trayectoria como cantante de protesta, madre, esposa y amiga, incluyendo su testimonio y el de familiares y artistas como Pablo Milanés, Chico Buarque, Charly García, René Pérez y hasta el ex líder de Taking Heads, David Byrne.
«Uno de los desafíos fue poder hacer un retrato de la artista en carne y hueso y mostrar a la persona detrás del bronce, como decimos nosotros», dijo el director del documental Rodrigo Vila a The Associated Press. «Creo que el desafío era hacer un documental que la respete pero que al mismo tiempo la muestre a ella con sus virtudes y debilidades, en un sentido positivo para humanizarla. Mi esfuerzo también fue llevado a eso, a que la gente conozca a la persona Mercedes Sosa ante todo y después a la artista, pero primero a la persona».
El documental de casi dos horas se estrenará en el Cinema Village, donde se mostrará durante al menos una semana antes de llegar al Festival de Cine de San Diego en marzo. Sosa cantó en los emblemáticos Carnegie Hall y Lincoln Center de Nueva York ante cientos de personas.
El largometraje nació como idea de Fabián Matus, el hijo de Sosa, quien ya había trabajado con Vila en un documental sobre el último disco de la artista, llamado «Cantora». Ese filme narra las colaboraciones musicales que Sosa hizo para el disco de duetos, con personajes como Juan Manuel Serrat, Shakira o Caetano Veloso.
Cuando Vila terminó de armar el filme en 2009, Sosa falleció. Matus le propuso entonces al director cinematográfico plasmar también el legado de su madre en una película.
Vila aprovechó material de dos entrevistas que le hizo a Sosa en su casa antes de que ésta muriera y lo incluyó en «La voz de Latinoamérica».
«Fue algo muy enriquecedor», explicó el director argentino. «El hecho de que ella compartiera conmigo ciertos recuerdos difíciles o ciertos pensamientos muy profundos fue lo que creo que más me impactó. En el sentido que creo que ella ya sabía que no le quedaba mucho tiempo. Nosotros no. Pensamos que iba a vivir más tiempo pero ella en su intimidad creo que lo sabía y por eso eligió contar esas cosas en ese momento».
El documental, que supuso tres años de trabajo, se filmó en Tucumán, Mendoza, París, Nueva York, Río de Janeiro y Santiago de Chile. Logró en abril el Premio del Público en el Festival Internacional de Cine de Panamá y se estrenó en junio en Argentina.
«Lo que intentamos es que durante la película la gente pueda, más que hacer un ejercicio intelectual, hacer un ejercicio emocional. Hay muchos momentos que son más emotivos que narrativos, a nivel cinematográfico, o una biografía típica», dijo Vila. «Buscamos llegar al espectador desde más del lado del corazón porque eso hacía Mercedes en el escenario».
