Una madre hispana fue encontrada sin vida el pasado martes en su apartamento en North Little Rock, Arkansas, luego de postear una selfie en Snapchat que muestra a su novio apuntándole en la cabeza con una pistola.
El novio fue identificado como Rafael González, de 20 años, quien según testigos, salió llorando del lugar diciendo que la había matado accidentalmente. Fue arrestado y puesto a disposición de la justicia acusado de homicidio en primer grado.
Allegados a la pareja relataron que ambos mantenían una relación inestable y turbulenta, En 2014, González había sido acusado de recibir productos robados por lo que se le había prohibido la posesión de armas.
Según la policía de Arkansas, Hernández compró una caja de balas el mismo día de su muerte. «Ella le compró un paquete de cuatro o cinco casquillos de bala». relató Jaquinlan Davis, amiga de Hernández.
Los detectives encontraron una pistola calibre .45 cargada y balas bajo un cobertizo cerca del apartamento, según documentos judiciales.
Davis, quien presenció la escena, relató el macabro hallazgo del cuerpo de su amiga. «El lugar fue saqueado. Hay sangre por todo el piso. En la ropa, por todas partes. Como si alguien quisiera simplemente empacar e irse», recordó. «¡Realmente no puedo creer que es verdad! Yo estuve aquí con ella ayer. No la había visto en unos 2 meses. Por lo menos 2 meses», dijo.
La tragedia deja huérfanas a las dos hijas pequeñas de Hernandez, una de 3 años y otra de apenas 8 meses. Lo más difícil de todo, desde luego, es explicar la ausencia de la madre. «Mis sobrinas han estado llorando toda la noche. Es simplemente muy duro «, dijo Camryn Starz, hermana de Hernandez.
la prensa honduras