Maniquíes con vello púbico desatan polémica en Nueva York

NUEVA YORK, 17 enero 2014 (AFP) – La cadena de ropa estadounidense American Apparel desató la polémica al poner maniquíes con vello púbico en las vidrieras de su tienda en el Lower East Side de Nueva York.

Los transeúntes se detenían este viernes a mirar boquiabiertos, tomaban fotografías, se reían o hacían gestos horrorizados al ver a las delgadas modelos de plástico con ropa interior que dejaba ver un tupido pubis.

Para muchos, el vello púbico de una mujer es una vergüenza privada que requiere atención especial en los salones de belleza, y los escaparates de American Apparel son escandalosos y provocativos.

Pero la empresa, que ha sido acusada de campañas de marketing sexistas y controvertidas en el pasado, dijo que así estaba celebrando la «belleza natural» de las mujeres a pocas semanas del Día de San Valentín, o Día de los Enamorados.

«Invitamos a los transeúntes a explorar la idea de lo que es ‘sexy’, considerar cuán cómodos se sienten con la forma femenina natural y quizás lo más importante, venir y probar algunos de nuestros modelos favoritos de la temporada», dijo la directora creativa de las vidrieras, Iris Alonzo.

Layla Khabiri, que trabaja en un bar de vinos y vive a la vuelta de la tienda, calificó la iniciativa como un «truco barato» diseñado para impulsar las ventas, pero le resultó interesante por ser un «poco contra-cultura».

Por ahora los maniquíes con vello púbico sólo están expuestos en esa única tienda de American Apparel en el sur de Manhattan, y no hay planes de replicarlos en otra parte de Nueva York o Estados Unidos, según la empresa.

Los clientes se mostraron divididos sobre si esto los hará gastar más en ropa interior de American Apparel, tanto para ellas mismas como para una mujer especial en su vida en este Día de San Valentín, que se celebra el 14 de febrero.

«No, pero paré y logró captar mi atención. Tal vez ésa sea la idea», dijo el desarrollador web Eric Chiu, de 33 años, cuando se detuvo para tomar algunas fotos.

Marc Mangano, un corredor de seguros de 41 años, estaba anonadado.

«Me encanta», dijo a la AFP. «Es simplemente increíble», añadió, con un cigarrillo colgando de su boca, aunque, dijo, «la mayoría de las mujeres se depilan un poco más ahí abajo».