La mujer, de la que solo se sabe su nombre, Lisa, dejó su mensaje para que su marido, Paul, lo viese en su camino al trabajo. Pero no solo él lo vio, miles de automovilistas también.
El mensaje completo que se podía leer era: A mi marido infiel, Paul. Os merecéis el uno al otro. Cuando llegues a casa no estaré allí. Disfruta de tu camino al trabajo. Lisa.
Las personas que estaban viendo el cartel empezaron a publicar fotografías en Twitter y Facebook.
Mark Catterall, de la agencia Kong Media, que vendió el anuncio a Lisa, dijo que la mujer pagó cientos de libras por la valla. El mensaje estuvo visible tres horas, desde las 6 a las 9 de la mañana.
La patilla