Te hacen ver más alta, estilizan tu figura, alarga y adelgaza tus piernas, te hace sentir más confiada y sexy… Las mujeres que amamos los zapatos de tacón conocemos a la perfección las ventajas de usarlos, a tal punto que poco nos importa extrañar la simpleza y comodidad de las zapatillas. ¿Eres una fanática de los zapatos con tacón como yo? Si es así, entonces te encantará conocer más beneficios de usar este tipo de calzado.
Según un estudio realizado por la Dra. María Angela Cerruto, uróloga de la Universidad de Verona, en el año 2008, las mujeres menores de cincuenta años que están acostumbradas a andar con tacones tienen los músculos pélvicos y abdominales más fortalecidos. Sucede que, cuando usamos este tipo de calzado, inconscientemente apretamos los músculos del abdomen y la pelvis para mantener el equilibrio y nuestra postura erguida.
¿Qué significa esto? Que caminar con zapatos de tacón puede ayudarte a tener el abdomen plano y una cintura envidiable, sin esos malditos rollitos. Mientras tanto, con los músculos pélvicos más desarrollados tendremos una vida sexual más gratificante, los partos se vuelven más fáciles y menos dolorosos y podemos evitarnos problemas como la incontinencia urinaria. Por eso, se dice que caminar con tacón funciona tan bien como hacer los famosos ejercicios de Kegel.
Otra ventaja de caminar con zapatos de tacón es que fortalecen los músculos de la pantorrilla, aunque la Dra Cerruto recomienda no usar tacón de más de 7cm altura sobre todo si se trata de zapatos de tacón de aguja pues estos aumentan el riesgo de lesiones. Y sea cual sea el estilo de zapatos que uses debes moderarte en la frecuencia que los usas y hacer estiramientos luego de usarlos.
Recuerda que, más allá de todo, lo importante es que te sientas cómoda con el tipo de calzado que usas diariamente. Cuando vayas a comprar un par de zapatos con tacón, asegúrate que te ofrezca el soporte y la amortiguación suficiente para tus pies. Y, si todavía no estás acostumbrada a usar estos zapatos, comienza con los de tacón corrido que son mucho más seguros y cómodos.
Porque, al fin y al cabo: ¿De qué sirve lucir zapatos con tacón si no nos sentimos bien con ellos? En esos casos, en vez de hacernos ver más estilizadas y sexies, ¡nos harán perder el equilibrio y tropezar!
