Ford ha mostrado en Alemania uno de sus desarrollos más destacados para aumentar la seguridad al volante por las noches: un sistema de luces capaz de identificar objetos y personas con ayuda de cámaras integradas.
El sistema de iluminación frontal avanzado se encarga de recoger información de las cámaras a bordo para amplía el haz de luz en cruces y rotondas, de manera que queda iluminada de mejor manera un entorno potencialmente peligroso por la posible presencia de peatones, animales u objetos en la calzada.
Una cámara que lee señales de tráfico y las marcas de la calzada
Ford ha construido este sistema sobre dos tecnologías que ya tiene en funcionamiento: la iluminación adaptativa y el reconocimiento de señales de tráfico. Así, cuando las cámaras detectan señales de pasos de peatones, rotondas o los ceda el paso, las luces se adaptan para iluminar de manera más amplia la zona.
En el caso de las curvas y cambios de rasante, la tecnología encargada de dar información a las luces para que mejoren su cobertura es el GPS. Si no hay señal suficiente entra en juego una cámara de vídeo frontal que se encuentra sobre la base del espejo retrovisor. Esta cámara detecta las marcas de la calzada y predice lo cerrado de una curva para iluminarla de manera más efectiva. En el futuro Ford pretende que esa información se sume a la base de datos del sistema GPS.
Agencias