Este aventurado hombre tiene la legua larga, no sabemos ni como llamarle pero una persona cuerda no haría tal cosa, pues se atrevió a retar a un cangrejo aún sabiendo que podría morir de una hemorragia si el animalito con sus fuertes tenazas le hiciera fuerte presión cortando el músculo, como se dice popularmente ¨Solo le agarró la puntita¨.
Al hacer un contacto las tenazas del cangrejo le capturan su lengua, de no ser por un amigo este hombre no estaría contando el cuento.