Dicen que según la forma en que recibimos el Año Nuevo se define cómo nos irá durante sus días. Cierto o no, festejar la Nochevieja y el inicio del nuevo ciclo luciendo fantástica siempre será considerado buen augurio.
Así que no hay que descuidar la apariencia: la propuesta es pasar Nochevieja con un maquillaje que resalte tus rasgos y les añada luz y sofisticación. Cómo lograrlo es lo que aprenderás a continuación.
El primer paso -y fundamental- es obtener una piel saludable y de apariencia uniforme: utiliza un buen corrector sobre todas las imperfecciones que quieras corregir, y luega aplica una base cuya textura se funda bien en tu tipo de cutis. Si quieres controlar el brillo y otorgar a tu piel una apariencia mate, no olvides el polvo compacto o volátil.
Los ojos de Nochevieja piden glamour y mucho brillo, para lograrlo, hay que utilizar sombras satinadas, con partículas brillantes o «glitters». Usá los tonos más claros en el canto interno de tus ojos (en el externo y la marca de profundidad se usan colores oscuros) y trata de fundirlos muy bien, ya sean dos o más colores, para que no se noten las líneas divisorias.
Completa el look con un buen delineado y abundante máscara para pestañas. Un consejo: si las fiestas de fin de año te ponen emotiva, no dejes de usar productos a prueba de agua. Aunque quizás no es la mejor alternativa para el uso diario, son perfectos para todo tipo de celebración.
Los pómulos deben resaltarse con un rubor suave, que marque las facciones de tu rostro y las levante, pero sin recargarlas. Los tonos rosados y duraznos son los mejores para las pieles blancas, mientras que los marrones y terracotas son ideales para las morenas.
¿Los labios? Aquí el gloss y los glitters también son bienvenidos, pero gradualos de acuerdo a lo que hayas elegido para tus ojos. Si los pintaste con sombras brillosas y de varios colores prefiere un labial más neutro, de lo contrario abusarías de los tonos vivos y vibrantes para tu boca.
Agencias
