¿Quieres saber cuáles son los rasgos de una mujer con gran fuerza interior y confianza en sí misma? Chequea estos tips para convertirte en una mujer fuerte e independiente, para dejar de ser tímida o esconderte, y hacer que seas respetada y feliz.
No te compares con otras mujeres
Es verdad que tener un modelo a seguir o admirar a ciertas mujeres está bien. Pero por el contrario, compararte todo el tiempo con otras mujeres y sentirte en desventaja te hace sentir insegura e infeliz.
Acepta tu cuerpo, deja de estar celosa por lo que no tienes y aprecia lo que sí tienes. No deberías comparar tus cualidades negativas con las positivas de las chicas de tapa.
No definas tu felicidad a través de una relación
Esto significa que la raíz de tu felicidad no debe ser tu relación de pareja. Debes asegurarte de tener otras cosas en las que puedas apoyarte y que te hagan feliz, como el trabajo, los hijos, el estudio o las amistades.
Las relaciones de pareja lamentablemente pueden no durar para siempre, y es necesario que puedas estar preparada para afrontar una ruptura o vivir un tiempo sin ese tipo de amor. La clave es el amor a ti misma.
No te obligues a seguir las tendencias en moda
Ser independiente en este caso quiere decir que puedes vestirte de la forma que deseas sin prestarle atención a los que dicen las últimas tendencias. Por supuesto que puede encantarte lo que se usa, pero a veces eso que está tan a la moda no te queda bien. Ten el coraje de combinar tus prendas basándote en tu estilo, siempre teniendo en cuenta la forma de tu cuerpo y tus gustos personales.
Protege tu sexualidad
En la vida seguramente vas a encontrarte con algún hombre que quiera más de lo que tú estés dispuesta a dar. Si sufres de insinuaciones o de acoso sexual, debes informarlo y no quedarte callada. Cuando un «No» no es suficiente debes hacer lo necesario por protegerte, sin miedos ni vergüenzas.
Preocúpate por tu educación
Ser culta no necesariamente tiene que ver con tener un título universitario. Preocúpate por mantenerte al día leyendo libros, periódicos, mirando las noticias, documentales, aprendiendo otro idioma, o lo que sea para formarte. Esto te asegurará que podrás hablar a la par con cualquier tipo de persona y que serás respetada.
Defiéndete sola
Está bueno tener alguien que te apoye, pero debes ser capaz de hacer escuchar tu voz y defenderte tú misma cuando algo no anda bien en relación con otra persona.
Debes aprender a ponerte de pie y evitar que se aprovechen de ti. Déjale en claro a la persona que obró mal contigo que eso no lo aceptas para que no se vuelva a repetir. No te quedes callada.
Cuida tu cuerpo
Para ser una mujer fuerte e independiente necesitas un cuerpo que te acompañe. No es que tienes que entrenar como loca todos los días para tener más músculos. Es suficiente que camines a diario, o que salgas a correr por el barrio o des una vuelta en bici.
La alimentación también es súper importante. Si incluyes frutas y verduras a tu dieta verás qué fuerte te sientes. Mantenerte en forma te dará más energía y te ayudará a rendir mejor en todos los aspectos de tu vida.
No dependas económicamente de otros
Una mujer independiente y fuerte puede mantenerse por sí sola. No te quedes tranquila sabiendo que tu marido o pareja te mantiene. Puede que no dure para toda la vida y cuando se acabe no sabrás por dónde empezar.
Si es que tu pareja es el sostén de la familia, busca tu camino, haz eso que siempre quisiste y adminístralo de la mejor forma posible. Administrar tu dinero de buena manera también es signo de una mujer independiente, que sabe manejarse en la vida.
Ayuda a los demás
Una mujer fuerte es capaz de ayudar a los que más lo necesiten, y para hacerlo no hace falta que te sobre el dinero. Puedes postularte como voluntaria en una asociación benéfica o bien ayudar con un simple acto a alguien que necesita una mano.
Y recuerda: Una mujer fuerte sabe lo que quiere, se conoce a sí misma, se desafía todo el tiempo, sigue sus instintos, y aunque la vida no sea color de rosa, ella sigue adelante luchando por lo que tiene sin llorar por lo que no puede.
