Paulina Rubio sufrió este martes 23 de junio otro revés en su eterna batalla legal contra su exmarido Nicolás Vallejo-Nágera, pues sus propios abogados renunciaron formalmente a representarla frente a la juez que lleva su caso.
La cantante mexicana llevaría más de un año sin pagar el salario de sus abogados y estos han conseguido que se imponga un embargo a la mansión de Miami de Paulina para obligarle a obtener el dinero para pagar sus honorarios, según se dijo en el programa El Gordo y la Flaca.
Paulina deberá encontrar un nuevo representante legal en un plazo menor a 30 días o se arriesga a que se detenga todo el proceso legal en el que se encuentra inmersa después de que su exmarido le denunciara por el impago de su pensión reclamándole 30 mil dólares, el montante total de los tres meses en los que según él Paulina no le ha pagado su pensión.
No obstante a esta situación, los problemas judiciales de la cantante se reavivarán el próximo martes, fecha fijada una para discutir los detalles de las semanas en que su hijo, Andrea Nicolás, pasará este verano junto a su padre, quien afirma que su ex mujer aún no le ha prestado el pasaporte del pequeño para poder viajar con él a España.