1. Labios tenues
Personalmente me encantan los colores fuertes en los labios, pero hace poco me di cuenta de que cuando me maquillo los labios con colores súper claros puedo dejar una impresión más afinada.
Si el color de labios se parece al tono de piel, la boca se ve más extendida y alargada, logrando un mejor equilibrio en las facciones que se traduce en una cara más delgada. Así que dejemos los tonos fuertes para eventos especiales, y en el día a día optemos por labiales o glosses con tonos rosados y nude.
2. Mejillas a la mitad
Si tu problema son los cachetes, el bronzer es tu mejor afilado El truco es súper sencillo, no necesitan grandes cantidades, sino aplicarlo correctamente: con una brocha en diagonal tomen un poco de bronzer, retiren el exceso, y sonrían.
Se debe aplicar justo debajo de la bolita que se forma cuando sonreímos, en esa pequeña línea natural que hacen las mejillas, de adentro hacia la línea del cabello.
También pueden aplicar un poco sobre la línea de la quijada y en las esquinas de la frente, pegado al cabello. Y luego continúen con el blush. Si estamos buscando adelgazar la cara, les recomendamos usar poco blush y solamente en la bolita de las mejillas, de adentro hacia afuera.
3. Más sombras
Si vamos a bajarle el color a los labios, podemos subirle el color a los ojos. Anímense a usar más sombras, más delineador, más rímel… todo para que la atención se concentre en esa parte de los ojos. Si enfatizamos la mirada crearemos el efecto de triángulo invertido que suponen las caras delgadas.
4. Ceja gruesa
Uno de los mejores trucos para acentuar la zona de los ojos es mantener la ceja lo más gruesa posible. No se trata de que nunca te depiles, sino de mantener su grosor natural al delinearla.
Agencias
