La saga de la rata frita que supuestamente fue encontrada en un KFC y se popularizó en Facebook dio un vuelco más luego de que un laboratorio independiente comprobara que la extraña pieza de comida era realmente pollo, informó Huffington Post.
El caso se volvió conocido mundialmente luego de que Devorise Dixon publicara por Facebook una foto de la pieza que, según él, tenía una textura y forma extraña. Añadió que el gerente de la tienda confesó que era rata y empezó un litigio contra la cadena de comida rápida.
Posteriormente KFC intentó controlar la situación señalando que la apariencia ratonil de la comida es solo por un ángulo e intentando conseguir una muestra del alimento para comprobar si realmente era pollo.
Dixon se negó y le encargó el análisis a un laboratorio independiente. Este confirmó la versión de KFC.
La compañía también afirmó que Dixon había mentido cuando dijo que le habían confesado que la pieza de pollo era una rata.
Lo correcto sería que este cliente se disculpara y que dejara de decir mentiras sobre KFC, señaló la cadena, que no descarta demandar a Dixon.
Agencias
