A los perros no les gustan las personas que son desagradables con sus dueños e incluso les rechazan la comida si se la ofrecen, según un estudio japonés.
Los perros serían entonces capaces de juzgar a una persona en función de su comportamiento en sociedad.
«Hemos descubierto por primera vez que un perro podría evaluar la sociabilidad de un individuo independientemente de su interés directo», explicó a la AFP Kazuo Fujita, profesor de Psicología Comparativa de la Universidad de Kioto y director del estudio.
Esta conclusión se apoya en una serie de experimentos con un total de 54 perros repartidos en tres grupos.
El primer grupo recibió su alimento de manos de una persona que, frente a ellos, se negaba ostensiblemente a ayudar a su dueño a abrir la lata de comida. Estos perros tenían al mismo tiempo la posibilidad de elegir el comedero que les servía una persona «neutral», es decir desconocida por los animales y que no manifestaba ningún sentimiento.
Los perros del segundo grupo podían elegir entre un comedero servido por una persona que ayudaba a su amo a abrir la lata y el del actor neutral.
Por último, a los perros del tercer grupo (llamado «de control») les servían dos personas que no tenían ninguna interacción con sus dueños.
Las pruebas se repitieron cuatro veces en cada grupo. En el primer caso, sólo un perro eligió el comedero de la persona que no cooperaba con su dueño.
En los otros dos grupos, los animales no mostraron ningún rechazo o preferencia por las personas que les daban de comer.
Si los perros hubieran actuado solo por interés, no habría habido ninguna diferencia entre los grupos, subrayó el profesor Fujita, señalando que los perros comparten con los humanos la capacidad de actuar independientemente de su interés personal.