El pasado fin de semana un toro escapó durante la celebración de unas fiestas en Talavera de la Reina, España. Para detenerlo la policía local determinó arrollar al animal hasta provocarle la muerte.
A la tragedia se sumó el torero Sergio Blasco, quien eligió la penosa escena para una selfie. La imagen ha sido severamente criticada por organizaciones por los derechos de los animales.
Ni respetan a las personas, ni respetan a los animales, señaló la organización Pacma.
Al escapar el toro embistió a más de un decena de personas quienes tuvieron que ser trasladadas a un hospital, entre ellas un menor de edad.
Blasco, en el momento de la huida del toro, estaba encargado de enseñar toreo a más de cien niños en la plaza de la localidad. Señaló a medios locales que el toro era manso pero no pudo evitar atropellar a quienes estaban en su camino.
Agencias
