Esta cámara, que será presentada en la Conferencia Internacional de Fotografía Computacional de la Universidad de Rice en Houston (EE.UU.), mide la luz incidente y la convierte en energía eléctrica. Entonces, para que la cámara funcione es necesario que esté en un ambiente bien iluminado para que genere imágenes de forma ilimitada.
Los creadores ser basaron en la tecnología de los paneles solares y las cámaras digitales. Por ello, los componentes que los integran son prácticamente los mismos, ya que utiliza el fotodiodo (mecanismo que produce corriente eléctrica al exponerse a la luz), permitiendo que cada píxel mida la intensidad de la luz que recae sobre el tente de la cámara.
Esto es sólo la punta del iceberg. Se espera que las imágenes digitales lleguen a campos emergentes como dispositivos portátiles, redes de sensores, entornos inteligentes, medicina personalizada o la internet de las cosas. Una cámara que pueda funcionar sin ataduras para siempre, sin fuente de alimentación externa, sería increíblemente útil, explica Shree K. Nayar, líder del estudio.
El prototipo, financiado por la Oficia de Investigación Naval estadounidense, es capaz de crear, por el momento, imágenes de 30×40 píxeles. Cada uno de ellos utiliza tan solo dos transistores y en cada captura los píxeles leen y graban la imagen; luego cosechan la energía y finalmente cargan la fuente de alimentación del sensor de la cámara.
Creemos que nuestros resultados son un importante paso adelante en el desarrollo de una nueva generación de cámaras que pueden funcionar por mucho tiempo, idealmente, para siempre, sin alimentación externa, aclara Nayar.
Agencias