La advertencia fue hecha por investigadores en el Reino Unido quienes aseguran que algunas fórmulas hacen que el paciente supere la dosis de sodio recomendada al día para un adulto. Esto, según los autores del estudio publicado en la revista especializada BMJ, tiene consecuencias potencialmente peligrosas.
En el trabajo se analizaron los resultados de 1,2 millones de pacientes en ese país, y descubrieron que existe un vínculo entre las pastillas efervescentes y los infartos y accidentes cerebrovascular.
Comparado con los pacientes que tomaron el mismo medicamento sin sal, aquellos que con regularidad consumían fármacos solubles o efervescentes aumentaron en un 20% el riesgo de tener un infarto, un ACV o de morir de alguna causa vascular.
También eran siete veces más propensos a desarrollar presión arterial alta o hipertensión, que según los investigadores son la raíz del problema.
El jefe del estudio, doctor Jacob George, de la Universidad de Dundee, dijo que sabían que mucha sal causa hipertensión y que «la hipertensión lleva al ACV».
La Fundación Británica del Corazón anunció que era importante recordar que el trabajo se aplicaba a las personas que toman estas medicinas a diario, ello no quiere decir que un uso ocasional vaya a significar un peligro para la salud del corazón.
Las medicinas efervescentes contienen una sustancia llamada bicarbonato, que ayuda a que se produzca ese burbujeo y se disuelva, con frecuencia esta se combina con sodio.
El estudio analizó 24 tipos de medicinas efervescentes, incluyendo los analgésicos comunes como paracetamol y aspirina, así como suplementos.
El doctor George considera que la gente debe estar al tanto de los riesgos, mientras que la industria farmacéutica debería pensar en cortar el contenido de sal en sus productos.