Ayer, la Secretaría de Cultura de la Presidencia (Secultura) emitió un comunicado para pronunciarse sobre el robo de la pieza arqueológica Cabeza de jaguar que fue sustraída de la finca Loma de Paja, del Caserío Las Cruces, en Chalchuapa, el pasado 1 de marzo.
Como Secultura nos mostramos sorprendidos y, a la vez, indignados por este hecho, en el sentido de que se trata de un atropello a la riqueza cultural del país, afirma el ente cultural a través del comunicado.
En la misiva, la entidad afirma que la pieza Cabeza del jaguar no formaba parte de los bienes culturales del país, debido a que el propietario del indicio arqueológico (finca Loma de Paja) no lo registró en la instancia correspondiente (Secultura), tal como lo establece el artículo 9 de la Ley Especial al Patrimonio Cultural de El Salvador.
La institución señaló que conoció sobre el hurto debido a la denuncia que hizo el arqueólogo Federico Paredes, a través de las redes sociales. Paredes sabía de la existencia de la pieza ya que ha realizado investigaciones en la zona.
En un medio electrónico el arqueólogo afirmó que la pieza fue hurtada por negligencia de la Secretaría de Cultura, dado que la institución no la había registrado en la Lista Roja de Bienes patrimoniales; sin embargo, el ente cultural aseguró en el comunicado que la Ley Especial al Patrimonio Cultural de El Salvador no lo faculta para irrumpir en propiedad privada y hacer un registro.