El proyecto empresarial de hidropaneles Source Global, tiene como misión proporcionar agua potable, limpia y sostenible a partir de la luz solar y el aire. La iniciativa, que quiere abastecer de agua a todos los pueblo que tiene difícil acceso al líquido, llamó la atención del cofundador de Microsoft, Bill Gates, y la compañía estadounidense de gestión de inversiones Blackrock.
Ambas compañías se encuentran, entre los inversores Breakthrough Energy Ventures de Bill Gates, Blackrock y Duke Energy. Son como los paneles solares, pero en lugar de electricidad, producen agua.
Los hidropaneles de Source Global crean agua de la nada y la llevan donde más se necesita. Su director ejecutivo, Cody Friesen, inventó los paneles en 2014 en las Escuelas de Ingeniería Ira A. Fulton de la Universidad Estatal de Arizona, donde forma parte del cuerpo docente.
Hidropaneles, la solución ante escasez de agua
El gerente general de Source Global, Cody Friesen, inventó en 2014 esos paneles de tecnología de agua renovables, en las Escuelas de Ingeniería Ira A. Fulton de la Universidad Estatal de Arizona (EE.UU.).
«Tomamos la luz del sol y el aire y podemos producir agua potable perfecta en cualquier parte del planeta»; explicó Friesen. «Y así tomamos el agua, que históricamente ha sido probablemente el mayor desafío de la humanidad, y la convertimos en un recurso renovable que es esencial en todas partes».
Los hidropaneles de Source toman aire del entorno a través de ventiladores y, utilizando el calor del sol, el sistema convierte las moléculas de vapor en agua líquida purificada, que se recoge en un depósito y se libera como agua pura, que se mineraliza con magnesio y calcio para conseguir un perfil de sabor ideal.
Gracias a las inversiones de la empresa de Bill Gates, la compañía de hidropaneles ha recaudado 150 millones de dólares. Sus paneles producen un promedio de 3 a 5 litros de agua potable por día, y actualmente se encuentran instalados en 52 países como parte 450 distintos proyectos.
Para 2018, Friesen había instalado una serie de 40 hidropaneles en Kenia, donde los miembros de la Samburu Girls Foundation enfrentaban peligros diarios en sus viajes para encontrar agua.