Google medirá ritmo cardíaco y respiración a través de sus smartphones

Google anunció este jueves que sus teléfonos Pixel añadirán a partir de marzo próximo una función que permitirá a sus cámaras medir el ritmo cardíaco y respiratorio de los usuarios sirviéndose de técnicas de inteligencia artificial (IA). Infobae 

El nuevo software permitirá medir la frecuencia cardíaca y respiratoria a través de la lente de la cámara de los teléfonos inteligentes.

Luego, la aplicación sigue los cambios en el color de la piel para medir el flujo sanguíneo. Para eso utiliza fotopletismografía, la misma tecnología que las aplicaciones que rastrean los cambios en el color de la piel para detectar señales biológicas.

Para medir el ritmo respiratorio, el usuario deberá situar la cabeza y parte superior del torso de manera que queden encuadradas por la cámara frontal del dispositivo, y respirar con normalidad, para que la inteligencia artificial pueda hacer una estimación con base en el movimiento del pecho.

Para el ritmo cardíaco, bastará con colocar la punta del dedo sobre la cámara posterior, y el aparato ofrecerá un resultado basado en los cambios de color producidos por la circulación de la sangre.

Te puede interesar: Virufy: La app para detectar COVID-19 desde el celular con solo toser

No lleva acabo diagnósticos médicos

Google alertó que estos sistemas de medición no han sido diseñados para llevar a cabo diagnósticos médicos, sino que su función es únicamente ayudar a las personas que así lo deseen a mejorar sus hábitos de salud y bienestar.

Sin embargo, la compañía explicó que la tecnología presentada el jueves sí ha sido validado clínicamente, y que próximamente publicará un artículo basado en su investigación al respecto.

Estas nuevas funciones formarán parte de la aplicación Google Fit, y el usuario podrá conservar las mediciones en el teléfono para observar su evolución a lo largo del tiempo.

Alphabet, el conglomerado que incluye a Google, anunció el pasado martes que en 2020 aumentó su beneficio neto en un 17,25 % hasta los 40.269 millones de dólares, en un año en el que sus servicios han sido más demandados que nunca debido a la pandemia y con una mejora del segmento de anuncios digitales.

Los ingresos de la compañía aumentaron un 12,77 % hasta los 182.527 millones de dólares, con avances en el tradicional negocio de anuncios digitales y con una mejora de los ingresos en Google Cloud, los servicios en la nube en los que compite con Amazon, del 46 % hasta los 13.059 millones de dólares.