No ha pasado ni una semana desde que los fundadores de Instagram anunciaran que renunciaban a sus cargos por culpa de unas diferencias con el dueño de Facebook y de Instagram Mark Zuckerberg. Esto ya auguraba cambios en la red social, cambios que empezamos a ver ahora cuando se ha descubierto en la configuración de privacidad de Instagram que los datos de geolocalización se comparten con Facebook con fines publicitarios.
La semana ha sido movida para la red social, desde la salida de los dos fundadores Mike Krieger y Kevin Systrom, según ellos mismos, por discrepancias con el fundador de Facebook Instagram, Adam Mosseri. El martes nos preguntábamos si estos movimientos eran positivos o no, y parece que no hemos tenido que esperar mucho para hacernos una idea del rumbo que va a tomar la red social.
Un día después de la caída masiva de Instagram, se ha descubierto una nueva configuración en la que las coordenadas GPS recopiladas por la aplicación incluso cuando no se está usando se compartirían con Facebook para que este oriente los anuncios y recomiende contenido relevante a los usuarios.
Un portavoz de Facebook ha intentado tranquilizar a los usuarios en unas declaraciones al medio TechCrunch: "no hemos introducido actualizaciones a nuestra configuración de ubicación. Como ya saben, a menudo trabajamos en ideas que pueden evolucionar con el tiempo o, en última instancia, no ser publicadas. Instagram no almacena actualmente el historial de ubicaciones" ha explicado; y añade: "Mantendremos a la gente actualizada con cualquier cambio en nuestra configuración de ubicación en el futuro". Estas palabras dejan bastante claro que se trata de una versión en pruebas que la compañía podría considerar en hacer oficial dentro de poco.
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Acceder al historia del ubicación de Instagram ayudaría a Facebook a saber que negocios o locales solemos visitar, por qué vecindarios nos movemos y recomendarnos anuncios adaptados a nuestros datos. La sección encontrada se encontraría en la Configuración de Instagram y en el apartado de Privacidad como "Historial de localización".
Esta práctica no va a gustar nada entre los usuarios de Instagram; es un claro ejemplo de los problemas de imagen que lleva arrastrando la compañía desde hace una años. Facebook ya se ha enfrentado a otras multas por compartir de forma ilegal los datos de los usuarios de WhatsApp con Facebook, en España llegó a los 600.000 euros al la cual hay que sumar otras cifras similares en otros países europeos.
Además, desde el escándalo de Cambridge Analytica, la compañía ha estado en el ojo del huracán y tenido que dar muchas explicaciones por sus políticas de privacidad. Mientras, Instagram, que compró Facebook hace seis años por 700 millones de dólares, ha servido como salvavidas de la compañía durante este tiempo.
A la vez que Facebook perdía usuarios a marchas forzadas, Instagram ganaba popularidad con nuevas funcionalidades y manteniéndose lejos de la mala imagen de Facebook; una encuesta revelaba en abril que más de la mitad de los usuario de Instagram no eran conscientes de que era propiedad de Facebook, algo que pronto se va a acabar.
Fuente: COMPUTER HOY