La joven afirma que no sabía que había violado las normas de la compañía y dice que su video fue "un error inocente".
La compañía Apple ha despedido a uno de sus empleados después de que su hija, Brooke Amelia Peterson, publicara un video en el cual mostraba un iPhone X, violando así la norma de la empresa que prohíbe enseñar los nuevos dispositivos antes de su lanzamiento, ha contado la joven en su videoblog en YouTube.
La chica ha explicado que aproximadamente hace un mes visitó a su padre en Apple Campus, la sede general de la empresa en California. En ese momento su padre ya tenía un iPhone X.
En las instalaciones de la compañía, donde está estrictamente prohibido grabar imágenes, la joven filmó un "video divertido" donde aparece el nuevo modelo de teléfono inteligente.
Las imágenes se hicieron virales y la compañía pidió a la chica que las eliminara de su videoblog. La bloguera obedeció, pero ya era tarde, pues varios usuarios las habían subido ya en sus cuentas de YouTube, donde todavía pueden verse.
Paso seguido, Apple tomo la decisión de despedir al padre de Amelia por violar las normas de la compañía, en la que trabajó como ingeniero en la creación de Apple Pay durante casi cuatro años.
Este "error inocente", como lo llama la propia Amelia, puso en evidencia unos códigos QR que están disponibles solo para empleados de la compañía. Además, en el video se mostraba la aplicación de notas en la cual estaban indicados los nombres clave de los productos no lanzados de Apple.
Este 27 de octubre se abrió en todo el mundo el periodo de preventa del iPhone X, un dispositivo que causó furor en su presentación a principios de septiembre. En Rusia, todos los iPhone X ofrecidos en la tienda oficial de Apple Store fueron encargados en tan solo tres minutos.
Una situación semejante experimentaron las tiendas en línea oficiales del iPhone X en EE.UU., y ya se vaticina un posible déficit del nuevo 'smartphone', pues las entregas del dispositivo se dilatarán más de lo previsto debido a los problemas de producción a gran escala, opina la revista en línea rusa 'Republic'.