Un equipo de investigadores de la Universidad Técnica de Berlín ha tenido esta gran idea: el uso de emoticones como código de acceso para smartphones.
Según el portal Daily Mail, dicho sistema de acceso lleva el nombre de EmojiAuth. Para conocer su eficiencia los especialistas realizaron un experimento inicial que corrobora que tan buenos serían los usuarios en recordar sus contraseñas con emoticones.
En la actividad participaron 53 personas a las que se les proporcionó un smartphone con el sistema Android.
En un primer momento se dividieron en dos grupos, en uno las personas debían seleccionar de manera individual una contraseña compuesta por estas graciosas caritas, mientras que en el otro tendrían que elegir un código numérico.
Los resultados del experimento arrojaron que ambos tipos de contraseñas fueron recordadas, aunque para aquellos voluntarios que utilizaron los emoji resultó más rápido y divertido recordar sus códigos, así lo informa El Salvador.com.
En la investigación también se comprobó que los emojis son más fáciles de memorizar que los números o las letras, aún más cuando van acompañadas por algunos otros símbolos, lo cual añade el valor de la seguridad.
Además, permite contar con más de 2 mil 500 emojis como claves de acceso y esto lo más resistente al hackeo.
En contexto
Si hacemos caso al último informe de Keeper Security sobre las contraseñas más usadas el año pasado, está claro que hay una parte de los usuarios queno conoce los requisitos de una contraseña segura. Es por eso que, según apuntan desde Mashable, la Universidad Carnegie-Mellon ha habilitado una web que muestra cómo crear claves seguras a los usuarios menos duchos en la materia.
Se trata de un proyecto conjunto con la Universidad de Chicago a cuya demo puede accederse desde aquí, mostrándonos en pantalla una especie de "medidor de seguridad" con el que esperan "educar" a los usuarios más inexpertos las formas en las que pueden hacer que sus contraseñas sean más seguras. El proyecto es totalmente open source y se puede añadir a servicios existentes.