La profanación de tumbas se considera un delito en Nicaragua. Además, se vulnera la dignidad de la familia de la persona fallecida; así se encuentra una familia originaria de la ciudad de Jalapa, en el departamento de Nueva Segovia, luego que una mujer que tenía unas horas de haber sido sepultada, personas inescrupulosas, abrieran su tumba.
El lamentable hecho que consternó al municipio, se dio el pasado 31 de mayo, cuando unos trabajadores del cementerio observaron que una de las tumbas estaba semiabierta; además de expulsar hedor por su estado de descomposición.
La difunta, de 20 años de edad y de iniciales S.J.P., había sido sepultada un día antes.
Según información oficial, los trabajadores comunicaron lo sucedido a la familia de la fallecida; quienes llegaron al sitio y posteriormente pusieron la denuncia ante la Policía Nacional.
«Los bloques estaban sin el cemento, cuando llegamos el ataúd estaba adentro, pero no tenía una anillo que llevaba en uno de sus dedos de la mano derecha; tampoco una pulsera y no tenía un ramo de flores que le habíamos puesto»; expreso una familiar.
De esta forma, los investigadores de la institución policial, levantaron las evidencias y se presume que el cadáver también haya sido abusada sexualmente, por lo que se trabaja para dar con el paradero de los delincuentes.