El dar un aventón le puede costar la vida al señor Walter Bonilla, de aproximadamente 45 años; quien recibió al menos tres impactos de bala en su espalda y pecho la noche de este lunes, cuando se disponía a llevar a su casa a una amiga en el sector conocido como La Bolsa, en la Comarca Las Jagüitas. El suceso se desencadenó cuando la joven se encontró con una persona que le debía dinero; y no se imaginó que, por cobrarle, uno de sus hermanos reaccionaría de esta manera.
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“Yo a él me lo encontré por PriceSmart en Carretera a Masaya, le pedí raid porque vengo de la Laguna de Apoyo; de lo más tranquilo me dijo que sí y se dejó venir diciéndome que hasta la casa me iría a dejar porque a esta hora es peligroso. Cuando vamos llegando, yo me encuentro con Walter Velásquez, mejor conocido como Chang; y le pregunto por un dinero que me debe, 6,500 córdobas, y me gritó que ni verg% me estaba pagando. Hasta me dijo zorra y me mencionó a mi mamá, como que ella tuviera algo que ver. Yo hasta me puse a reír creyendo que estaba bromeando”; relataba entre nervios Martha Aguilar, una de las involucradas en este percance.
Aguilar comentó también que, en eso, observó que venía el hermano del famoso Chang. “En lo que estaba arrancando ‘Güatera’; como le digo de cariño al señor que me dio raid, sacó una pistola y empezó a tirarnos. Yo me tiré a la tina de la camioneta porque venía atrás y solo escuchaba los balazos como daban en la camioneta”, enfatizó.
Al menos cinco balazos por dar un aventón a una conocida en Managua
Cuando los balazos dejaron de sonar en la camioneta, la joven de veinticuatro años se bajó a ver qué había sucedido con la persona que la llevaba a su casa, pues no contestaba a sus llamados. Fue en ese momento que se percató de que estaba bañado en sangre y suplicando por su vida.
“Yo grité para que me ayudaran, pero nadie salió, nadie vio nada, y yo me puse a llamar a la ambulancia para que vinieran. Traté de calmarlo, pero estaba bien herido el pobre. Los responsables de eso ahí nomás se fueron. Yo ya les enseñé dónde es que viven a los oficiales, aunque no creo que los vayan a hallar ahí. Todo por 6,500 córdobas que le presté para que saliera de un clavo. Qué irónica es la vida, por pedir lo que era mío, ahora ve en lo que estoy metida, y el pobre hombre que hasta en camioneta prestada andaba, porque solo salió a echar combustible y me dio raid”; recalcó Martha.
El hombre, que se debate entre la vida y la muerte, fue llevado en condición reservada hacia el Hospital Manolo Morales; lugar donde los médicos hacen todo lo posible por salvarle la vida, a pesar de que tiene todos los pronósticos en su contra.
